Hoy he empezado
una nueva etapa. Paseando por el parque buscando unos momentos de relax.
Después de caminar
por entre las sombras espesa de la arboleda termino sentada en el mejor banco
con una sombra tupida y el suelo recién regado, es un momento de reflexión y
cargar las pilas para el nuevo asalto. Asalto que al llegar a casa tengo que
lidiar con mi mente y con la vida.
Mirando alrededor
observo el suelo del parque, la tristeza de ver como las personas tiran sin
reparo todo al suelo; ¡y, lo triste! Es que a unos metros del banco se
encuentra una papelera, papelera vacía esperando ser utilizada. Se ve de todo,
vasos, botellas, cajas de leche, papeles y cáscaras de pipas. Nadie, nadie les
dice ¿para qué están ahí las esos recipientes? La educación cívica brilla por
su ausencia.
Caminaré lenta y triste. 31-8-2018 Joaqui.
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