martes, 20 de septiembre de 2016

El maltrato



El maltrato
Estoy en contra de todo maltrato, sea a quien sea, animal o persona.
Pero observo que hay personas que defienden a los animal es como si en ello les fuera la vida. Pienso, que desde que el mundo existe –lo que conocemos- se desarrolla el más fuerte y siempre es este el que prevalece sobre el otro.
El hombre se come a todo “vicho” viviente que pisa la tierra ¡y como ellos no hablan! Nosotros disfrutamos de ellos saboreando sus cuerpos. Langostas, pulpos, caracoles, terneras, cochinos, ¡Y los huevos! De ellos nacerían... Etc…
Y ni que decir de las hojas verdes, tubérculos, en fin todo lo matamos para disfrute del hombre. O, para que viva el hombre
Muchas veces cuando vas al huerto a por una lechuga, das vueltas a ver cuál es la mejor. Ella también te observa y pensará ¿Este “tío” me corta y dentro de un rato estoy en la cazuela hirviendo o, nadando en aceite y sal? Nos mira con tristeza y solo quiere que te separes del huerto y lo dejes en paz. Pero el hombre la arranca y se la lleva a la boca. Tiene que sobrevivir y, estos son los medios que hay.

Centremos el asunto en los animales, estos se multiplican por miles,  y ¿cómo no se pueden matar? ¿Quién los cuidará? ¿Y al hombre? Porque, el sueldo no da para mucho y la vida es comer para mantenerse, y sobrar, sobra poco. No da para muchas familias, cuanto más…
¡Por ahí, se ven parejas que defienden a estos animales a capa y espada! ¿Pero cuanto les sobra para mantener a tanta hambruna como hay en el mundo?
No tengo nada en contra de los animales. ¡Y por supuesto! Más de una vez que he visto pegar alguno, me he metido en medio para pararlo, sin pensar en las consecuencias.
En una ocasión paseando por la Calle Pintores (Cáceres) Había dos chicos discutiendo, uno tenía una navaja en la mano y el otro borracho, éste insultando y metiendo cizaña.
Como pude me fui acercando al chico de la navaja muy despacio y con suerte, todo hay que decirlo, conseguí acercarme a él, y hablando para que no siguiera escuchando los insultos del otro. Conseguí que el chico se marchase sin que pasara nada.
Y con los amos de algunos animales, también he tenido algún que otro encontronazo, estos me mandaron… Pero conseguí que los dejasen en paz.
Pero a lo que vamos… Si no se pone remedio para que no se reproduzcan, algunos animales, dentro de poco habrá más gatos y perros que personas. ¿Y luego, quién se comerá a quién? Que yo sepa no se ha visto a ninguno de estos coger un pico o, una pala para labrar la tierra, para comer ellos mismo cuanto más para sus amos. Que cumple su misión de guardar la casa, dan compañía. Pero  con eso nos se alimenta nadie. Y de fregar, o poner la casa en orden. Solo saben abrir la boca para comer y luego se “cagan” en las manos de sus dueños, pero los amos si se “caga”…
Estoy en contra de cualquier maltrato venga de donde venga. Pero pienso que hay muchas formas de ayudar a los que vivimos en este mundo…
Personas que no pueden pagar una residencia y la mitad de los días se irán a la cama mal nutridas, ¡no, por qué no tengan!, sino porque no las dejan su mente de hacer las tareas. Todos debemos de ayudar a que este mundo mejore, pero hay más cosas para emplear nuestras fuerzas.

                                     20-9-2016   Joaqui.

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