El piano
Tus manos acarician sus teclas, el piano grita
cuando tú no estás. Las horas pasan lentas; los años rápidos. El teclado te
llama.
El invierno largo y triste, con sus cortos
días y la noche inmensa como nuestras ganas de crecer.
El tiempo pasa deprisa, igual que la niñez,
inmersos en él. Cuantas veces disfrazamos en el espejo nuestra mente,
intentando decir, hoy es primavera.
Del espejo sale la maldad que lleva dentro, y te
muestra tu máscara y sonríe.
Muchos queremos escapar de ese tiempo, pero nadie
puede huir. En él la lentitud es la que manda.
Tus manos acarician las teclas del piano ahí, es
donde el tiempo apenas ha pasado.
Se mueven las huellas de tus dedos una a una, derecha
izquierda, sin parar, demostrando que tus notas suenan a gloria cada vez que
tus dedos acarician las teclas. Tus pies vibran a los compás de tu mente.
Esperando el amanecer recreando la música para el
disfrute de la mente.
6-2-2015 Joaqui.
No hay comentarios:
Publicar un comentario