lunes, 20 de noviembre de 2017

El mar




Que atracción tiene sobre  el ser humano, deseamos estar a su lado con todas nuestras fuerzas y llegando, nos para poniendo la barrera del miedo.
Cruje y entre sus voces nos llama, -entra, entra, nos repite una y otra vez. Su voz es dominante, fuerte y segura, sabe lo que quiere, pero a la vez es temerosa.
Te vas acercando y te lame acariciando tus pies, con ello te invita a seguir cayendo en sus redes.
Sus babas  tapan el nivel de la arena seguido de la ola, esa ola traicionera que te moja sin piedad.
La fuerza de esta hace mover la arena para desequilibrar tu cuerpo, cuesta mantenerse en pies, pero el mar se ríe, se ríe de todos nosotros, ¡es tan poderoso! Tan inmenso. Por ello se permite reírse y emitir esas, esas voces que no entendemos, ¡pero, nos hablan!
Y con ella nos llama y en el menor descuido nos atrapa para disfrutar de nuestro cuerpo.
Algunos podemos contar los revolcones que recibimos entre sus olas y la arena, a otros los llevará mar adentro y solo lo soltará cuando ella quiera escupirlo.
                                              30-5-2016, Joaqui.  

viernes, 17 de noviembre de 2017

El adiós




El final del camino agotada con el paso del tiempo, ¡Los años pesan! Aquí Dejo seres queridos, pero también enemigos, esos que aplaudirán el día de tu marcha.
Llevo para el viaje las prendas que me dio mi madre. ¡Para qué más! Un poco deterioradas. Ella lo comprenderá.
Mi maleta la llevo llena de recuerdos. Recuerdos bonitos esos que se doblan no ocupando espacio.
El cariño de los míos, sus besos y algún que otro abrazo guardado con letras de oro.
De lo terrenal, ¿para qué? No necesito nada.
Volaré en el tiempo satisfecha de lo recibido. Quizás ellos han esperado más de mí, pero estaba tan ocupada en cosas vanas que me ha faltado tiempo.

                                     11-01- 2014-  Joaqui.

viernes, 10 de noviembre de 2017

Belén nº 11 tres generaciones





 Allí se fraguo el cariño de  esta extirpe. Al calor y el cariño de nuestros padres. Que supieron con su amor. Transmitirnos que la familia somos uno de los pilares fuerte de la sociedad. Siempre estamos ahí apoyando en lo bueno y en lo malo.
Ese patio que tantas horas nos ha  visto reír, jugar, cenar a la luz de la Luna. Desayunos en verano. Reuniones. También nos ha visto llorar, ¿por qué no?
No todo han sido sonrisas. Han pasado nubarrones que han tildado el día. Pero pronto han pasado.
 Hemos sabido nadar contra corriente. Imperando la cordura. Por ello un año más toda la familia unida en casa de nuestros padres. Cuarenta y cuatro personas; esta vez no ha faltado nadie.
Han pasado muchos años y parte del árbol falta.
 Ya no se canta, como antaño. Los que faltan están presentes y ello impide que la alegría sea plena.
Sus sitio están vacío. Nuestro corazón llora.
 La juventud canta y baila disfrutando de las horas felices de una familia que sabe llevar a todos de la mano.
 Gracias a la juventud que son los que reunen y organizan estos eventos y a los demás por aceptar.
                             02- 01. 2014 Joaqui.

lunes, 6 de noviembre de 2017

La vacuna




Tanto hablar de los políticos con manga ancha y estamos hasta las narices de tanto engaño.
Algunos, sin preparación para representar a España dentro del mundo. Son gente sin educación que solo saben insultar y desacreditarse a ellos mismos, porque a nadie se les escapa su falta de respeto.

Propongo:
                 Se fabrique una vacuna que obligatoria mente se les pondría en el momento de entrar en política. Poniendo este fabulo líquido en su cuerpo, cuando se vayan de la lengua ¡qué algunos se jartan! No respetando las leyes y solo mirando sus interese. La vacuna tendría una reacción alérgica creciéndoos las orejas igual que a los burros, grandes y hermosas. Que no se tapasen con el pelo.
Y a la vista de ello. A la “puta” calle, sin sueldo ni privilegios de nada. A, y las leyes que se cambien, ¡qué es eso de trabajar unos años y cobrar él %. Mientras que los demás nos matamos treinta y cinco años y nos queda una “mierda”!
Señores políticos hay que cambiar muchas, muchas cosas.
Yo, también quiero vivir bien, pero sin perjudicar a nadie.
                            6-11-2017   Joaqui.

Recuerdo




Tristeza al pasar por estas veredas donde tantos años hemos reído, llorado, comido, cantado, en fin días de glorias que será difícil de olvidar.
Pero tú cuerpo se ha marchado lejos, muy lejos. Y, ¿ahora qué? nunca se quiere tanto a una persona hasta que desaparece. Este campo que tanto amaste, herencia de tus antepasados y que supiste llevar con orgullo y cariño.
De ellas hiciste todo un albergue familiar. Pasó de ser unas  tierras olvidadas, a ser las más frecuenta das de esos entornos.
No te molestaba nadie ni ricos ni pobres, ni niños, ni viejos. Allí cabíamos todos. A todos abriste tú campo, tú casa y sobre todo la gran paciencia que de eso estaba sobrado.
Esos recuerdos que a cada paso afloran en la mente de todos. En medio de tantos recuerdos se oyen las voces del eco repitiendo el nombre. Cada árbol tiene las huellas de tus caricias, cada palmo de tierra las huellas de los pies.
Los olivos te echan en falta, y la encina que tantos años nos sirvió de sombra, se ha secado y sabemos que ella no volverá a florecer.
Ahora no será lo mismo aunque queramos estar alegres, tú sombra está presente.
Te fuiste sin apenas avisar por ello el dolor es doble. Ya no se canta, solo se pasa un día en familia.
Hay que seguir viviendo, por los jóvenes, por los niños pero nunca será igual.
Besos para todos los de ahí. 23-10-2017   Joaqui.