viernes, 5 de febrero de 2016

31-2-2016



                        31-2-2016

Como cambian los tiempos, hoy he asistido a la celebración de la misa, en la Parroquia de San Blas.
Casi todo ha sido nuevo para mí.
He comprobado que la distancia que separaba al sacerdote de los feligreses, ha desaparecido.
El sacerdote, ha realizado la misa, la mayor parte cerca de nosotros, como uno más en la iglesia.
Nos hablaba como en una reunión de amigos.
Se ha cantado y en el ambiente, se ha transmitido la cercanía de todos los presentes 
Se ha rezado el Padre Nuestro, uniendo  nuestras manos, desde una punta de la iglesia, a la otra. Transmitiendo la cercanía de Jesús con sus feligreses.
Antes mucho personal, éramos verdaderos extraños sentados codo a, codo.
Ahora, menos personal pero el espíritu de cercanía es grande, y  unidos en la celebración.
 Vivan los cambios.
31-2-2016,    Joaqui.

No hay comentarios:

Publicar un comentario